La alergia alimentaria afecta la salud y la calidad de vida
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| La alergia alimentaria |
La alergia alimentaria, un efecto adverso para la salud que surge de una respuesta inmune específica que se produce reproduciblemente al exponerse a un determinado alimento, afecta la salud y la calidad de vida de los individuos y sus cuidadores a través de una serie de dimensiones.
Una alergia alimentaria puede causar reacciones cutáneas, respiratorias y gastrointestinales.
La calidad de vida de las personas con alergia alimentaria disminuye a medida que se afectan sus interacciones sociales y las actividades de la vida de rutina.
Para algunas personas, una alergia alimentaria puede provocar reacciones alérgicas graves y la muerte.
Las alergias a los alimentos se desarrollan normalmente en el primer año de vida, pero también pueden desarrollar más adelante en la vida.
Se considera que ocho grupos de alimentos son alérgenos mayores.
Estos son:
- leche
- huevo
- cacahuete
- nuez
- trigo
- soja
- pescados
- y mariscos crustáceos
Las preguntas persisten sobre si la prevalencia de la alergia alimentaria ha estado en aumento en las últimas dos décadas y por qué.
Los datos actuales no apoyan inequívocamente la ocurrencia de tal aumento. Se han generado múltiples hipótesis sobre posibles factores genéticos y ambientales que conducen a alergias alimentarias y un posible aumento de los casos de alergia a los alimentos.
Simultáneamente con una percepción generalizada de un aumento de la prevalencia, el público y otras partes interesadas frecuentemente malinterpretan una alergia alimentaria y sus síntomas, cómo diferenciar una alergia alimentaria de otras enfermedades inmunológicas y gastrointestinales y qué métodos eficaces de manejo y prevención se utilizan.
Por ejemplo, los síntomas de intolerancia a la lactosa pueden ser mal interpretados como una alergia alimentaria, cuando en realidad su origen fisiológico y sus enfoques de manejo son muy diferentes.
La alergia alimentaria es una enfermedad compleja a nivel molecular y celular y, aunque se han acumulado muchos datos de investigación,quedan preguntas pendientes.
Por ejemplo, los investigadores están luchando para identificar los factores en el útero y durante el primer año de vida, como el momento de la introducción de alimentos sólidos o la duración de la lactancia materna, que podría dar lugar a la aparición de alergias.
En general, las brechas en el conocimiento a nivel mecanicista representan barreras para desarrollar estrategias de prevención y manejo de enfermedades.
No es sorprendente entonces que las recomendaciones de las autoridades de salud pública o asociaciones profesionales para prevenir o manejar una alergia alimentaria estén limitadas por los escasos o inconsistentes hallazgos de la investigación.
Aunque se están probando enfoques terapéuticos prometedores, actualmente no existen tratamientos efectivos para pacientes con alergias alimentarias.
En ausencia de tratamientos aprobados, se recomienda a los pacientes evitar el alergeno, que puede ser muy difícil, especialmente en algunas circunstancias.
Por ejemplo, bajo la Ley de Etiquetado de Alérgenos Alimenticios y Protección al Consumidor, los alérgenos alimentarios deben estar listados en la lista de ingredientes de un alimento envasado.
Desafortunadamente, durante la producción o fabricación, puede producirse una contaminación cruzada, dando como resultado que el producto alimenticio tenga un alergeno oculto que no aparece en la etiqueta.
Además, los establecimientos de servicio de alimentos están obligados a enumerar los alérgenos alimentarios, por lo que la seguridad de un individuo depende de una comunicación clara y del conocimiento de los empleados sobre el contenido de alergenos del alimento que se sirve y sobre las prácticas de manejo del establecimiento.
Incluso con las prácticas de gestión más estrictas, los accidentes, como los eventos de contacto cruzado, todavía puede ocurrir cuando las personas con alergia alimentaria comen fuera del hogar.
Los esfuerzos concertados de los responsables políticos, los líderes de la industria y otros son necesarios para lograr un ambiente seguro para las personas con alergia a los alimentos.
En resumen, muchas partes interesadas, incluidos los encargados de la formulación de políticas, la industria alimentaria, los científicos, los médicos y especialmente las personas con alergia alimentaria y sus cuidadores, se preocupan por los malentendidos y la falta de un tratamiento eficaz y enfoques claros para prevenir la alergia alimentaria.
Este informe recopila y evalúa las pruebas científicas sobre la prevalencia, los orígenes, el diagnóstico, la prevención y la gestión de la alergia alimentaria y hace recomendaciones a las partes interesadas para maximizar la seguridad y aumentar las actividades de investigación relacionadas con la alergia alimentaria.
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